Cuevas de las Bailaoras


El conjunto rupestre de las Bailaoras (correctamente dicho Bailadoras) formado por dos cuevas, una roca con arte rupestre y tumbas antropomorfas pertenece al término municipal de Los Barrios. Se encuentra en la finca Dehesa de Ahojiz, en el cerro del Laurel, cerca de la zona recreativa de La Montera del Torero. Las dos cuevas y la roca están protegidas por rejas de actos vandálicos que ya han sufrido, que en una de ellas han sido bastante fuertes.

Abrigo de las Bailaoras I, perteneciente al término municipal de Los Barrios

Panel principal del abrigo

El abrigo de las Bailaoras fue publicado por primera vez por U. y U.Topper en 1975, pero descubierto en 1970. Es un abrigo cuyo suelo es plano, y a la derecha tiene un agujero como resultado de la erosión. 


El dibujo que mas llama la atención es un cuadrúpedo, que pertenece al estilo semiesquemático bien conocido en esta región. Falta la formación de la cabeza, lo que es frecuente en este tipo de dibujos, mientras dos cuernos y una cola larguísima están bien indicadas. A la izquierda del animal se ve el puño de una espada o puñal, en el mismo estilo y técnica, lo que da un indicio para la datación de esta pintura en la Edad del Bronce. De los demás trazos y puntos que rodean al animal sólo destaca una figura humana estilizada, de su cadera sale una línea que indica tal vez una espada. A la derecha del cuadrúpedo hay dos antropomorfos.


En la parte derecha de la pared quedó un trozo pintado de extraordinaria importancia: se ve un grupo de cinco mujeres bailando, y es a causa de esta escena por lo que se denomina el abrigo "de las bailaoras".


 Puntos

 Más puntos
Cuadrúpedo de difícil interpretación, tal vez un cérvido con su cornamenta

Esta cueva ha sufrido daños muy graves, en su mayor parte vándalos que se han llevado trozos de la cueva. Por eso en esta y las demás cuevas de la zona se colocaron rejas. 



Calcos de U.y U. Topper en "Arte rupestre en la provincia de Cádiz, 1988"




Cerca del abrigo principal caminando por esta laja de arenisca hacia el oeste, nos encontramos con otra cueva. Su acceso es algo difícil , hay que descender por una roca plana, pero vamos, no hay problema para llegar allí. No hemos podido fotografiar la mayoría de las pinturas por culpa de la verja, que tiene los agujeros pequeños como para que no cupiese el objetivo de la cámara.

 La segunda cueva


 Antropomorfos.

Dejamos esta cueva y seguimos caminando al oeste. A escasos metros nos encontramos con una roca vallada. Es bastante curioso, porque al principio no sabíamos que había pinturas. Las pinturas que presenta tienen muy mal estado de conservación a causa de la fuerza eólica. 

 Roca con pinturas.


Estos últimos dos abrigos son muy poco conocidos. Ahora nos disponemos a explorar la zona en busca de tumbas antropomorfas. Solo localizamos dos.

 Tumbas antropomorfas.

Piedra probablemente usada como mortero.

 Cresta rocosa.

¿Pinturas?

 ¿Dolmen?


En la misma laja donde se encuentra la cueva, hacia el este, vimos desde lejos una cueva con una pintura moderna: UTO | UTA 1972. ¿Podrían ser firmas de la pareja Topper? ¿Son uno de los experimentos que hicieron probando pigmentos para las pinturas rupestres, según dicen en su libro? En otra visita intentaremos acercarnos a este abrigo y observarlo de cerca.